Como lo demuestra la ciencia, los distintos puntos o civilizaciones mediterráneas han logrado establecer un excelente patrón de alimentación saludable durante siglos. La dieta mediterránea, también conocida como AM, ha temrinado siendo un patrimonio cultural que se basa en la sencillez y la diversidad para crear una combinación alimentaria equilibrada y completa, que se ha alineado al mundo de la cocina para combinar tradición, salud y creatividad.

La dieta mediterránea se define como una dieta muy diversa, basada principalmente en productos frescos, locales y de temporada. No se trata de un modelo homogéneo en todos los países y ciudades que dan al mediterráneo, sino que existe una diferencia regional, según la cultura, pero el cual presenta el mismo patrón alimentario. Estas son las principales características comunes:

• Principal fuente de grasa: El aceite de oliva
• Gran consumo de vegetal: Verdura, fruta, legumbres, pan y arroz (Cada vez más integrales)
• Más consumo de pescado que de productos cárnicos, donde destaca más el consumo de aves y lácteos que de propia materia cárnica como la vaca o el cerdo.
• Producto de proximidad y fresco.

Barcelona, considerada por muchos, capital de la Dieta Mediterránea impulsa estos